Compartir: Twitter facebook Pinterest Linkedin Desconocido1 Desconocido

La organización A Favor de lo Mejor y Cemefi invitan a contar historias positivas de personas que mejoran su mundo y el de su entorno.

En las organizaciones de la sociedad civil hay muchas historias por compartir. Envíalas y tendrás la posibilidad de que sean publicadas en algún medio de comunicación, gracias al Pacto entre Medios, que tiene A Favor de lo Mejor.

Cuenta tu historia en 300 palabras, adjunta dos fotografías del protagonista y envía todo a alejandra.gonzalez@cemefi.org.

Tienes hasta el 8 de diciembre para que sean los medios de comunicación consideren su publicación en diciembre.

Desde septiembre que se firmó el Pacto entre Medios, convocado por A Favor de lo Mejor, se han difundido 3 historias de OSC que pertenecen a la Comunidad Cemefi: Fondo Guadalupe Musalem, La Cima IAP y Comunal. Gracias a UnoTV y a la revista MIT Sloan Review.

Historias de éxito de Christel House. Testimonios de Mariana Zárate y Leonardo Moreno.

Desde hace 25 años, Christel House prepara a sus estudiantes para que cuando se gradúen, logren una movilidad económica ascendente, sean buenos ciudadanos y se empoderen para que puedan identificar y realizar sus metas, sueños, así como su potencial humano. 

En la graduación 2023, hay dos alumnos destacados.

Mariana Zárate, se graduó con un promedio de 9.1. Por su destacado desempeño académico, y tras un exhaustivo proceso de pruebas académicas, ensayos y entrevistas, obtuvo la Beca Impulsa que otorga Deloitte, la cual cubre el 100% de gastos escolares, colegiatura y estancia. Gracias a esta beca fue posible ingresar a la Universidad Panamericana para estudiar la Licenciatura en Negocios Internacionales.

Mariana es un ejemplo de constancia, perseverancia y disciplina. El Modelo Holístico de Christel House le permitió desarrollar sus habilidades socioemocionales, y es una líder innata en su grupo, sabe tomar decisiones y ha superado varios retos, demostrando que los sueños se pueden cumplir.

Leonardo Moreno es otro alumno de excelencia que logró ingresar a la Universidad Autónoma Metropolitana para estudiar Historia. También es ganador de la beca Knebel, otorgada por Christel House International, el cual se obtiene por nominación de sus propios compañeros y profesores, y se otorga al alumno con una historia de vida que muestre los valores de la institución.

Los distintos retos familiares lo han convertido en un joven más responsable y comprometido, falleció su padrastro, su madre padece insuficiencia renal en etapa avanzada, cuida de sus hermanos y para cubrir sus gastos y aportar a su familia comenzó a trabajar como organillero en el centro de la CDMX y los fines de semana ingresó a una empresa como personal de limpieza. A lo largo de su trayectoria académica ha demostrado una gran resiliencia, fuerza, valentía, dedicación e integridad.

Con tu apoyo, Christel House puede seguir transformando vidas a través de la educación. Haz clic para donar, aquí.

Historia de éxito de La Cima IAP. Testimonio de Mayra Morales.

Antes de unirme a La Cima, mi vida transcurría en el pintoresco rancho de Santiaguillo, en Guanajuato. Nací en una humilde familia donde mi padre es campesino y mi madre es ama de casa. Nuestros ingresos siempre estuvieron por debajo de la línea de pobreza, lo que hacía que mis sueños de ir a la universidad parecieran inalcanzables. Pero eso no me detuvo.

Estudiar en Santiaguillo es un desafío, ya que las escuelas están lejos de las comunidades y no hay transporte para los estudiantes. Caminar largas distancias es la realidad cotidiana, y muchos jóvenes se ven obligados a abandonar sus estudios. Durante 6 años caminé 2 horas de ida y 2 horas de regreso para ir a la secundaria y preparatoria atravesando arroyos y ríos. Además, las oportunidades económicas son escasas y las costumbres influyen en nuestro futuro.

Desde pequeña, uno de mis más grandes sueños siempre fue asistir a la universidad y obtener un título en una profesión que me apasionara. Sin embargo, los gastos económicos y la falta de un lugar seguro para continuar mis estudios eran obstáculos que parecían insuperables. A pesar de las dificultades, estaba decidida a romper el ciclo de pobreza en mi familia y convertirme en la primera en mi familia en tener un grado universitario.

Todo cambió cuando conocí a La Cima IAP, un lugar que me brindó la oportunidad de seguir con mis estudios y garantizó la tranquilidad de mi familia al saber que estaría en un entorno seguro y de apoyo. Durante cuatro años y medio, fui beneficiaria de La Cima, y mi vida dio un giro increíble.

El programa de desarrollo humano de La Cima IAP ha sido una verdadera bendición en mi vida. Gracias a su apoyo y dedicación, he aprendido a superar mis miedos y a enfrentar los desafíos con valentía. Los talleres y clases que ofrecen me han brindado las herramientas necesarias para intentar cosas nuevas y ampliar mis horizontes. Además, vivir en comunidad con otras beneficiarias me ha permitido crecer en la convivencia con personas de diferentes experiencias y culturas, enriqueciendo mi perspectiva y enseñándome a valorar la diversidad. Gracias a La Cima IAP, he desarrollado una mayor confianza en mí misma y estoy lista para seguir explorando un futuro lleno de posibilidades.

En junio de 2023, logré graduarme en Ingeniería Ambiental, una carrera que me apasiona y que me ha abierto puertas hacia un futuro prometedor. Ahora, tengo un buen trabajo en mi profesión, y estoy decidida a buscar la estabilidad económica que permita ayudar a mi familia a salir adelante, superando las carencias que enfrentamos cuando era niña.

Mi visión de futuro es clara: deseo crecer profesionalmente, construir un patrimonio y, en unos años, formar mi propia familia. Pero no quiero detenerme ahí. Mi experiencia en La Cima IAP ha dejado una profunda huella en mí, y me siento motivada a inspirar a más jóvenes de mi comunidad para que sigan sus sueños y se conviertan en profesionistas exitosos.

Agradezco profundamente a La Cima IAP por el apoyo brindado en mi camino hacia el éxito. Su dedicación y compromiso han hecho posible que hoy esté aquí, cumpliendo mis metas y forjando un futuro brillante.

Mi historia es solo el comienzo, y estoy emocionada por lo que vendrá. Espero seguir impactando positivamente en mi comunidad y demostrar que, con determinación y apoyo, los sueños pueden hacerse realidad.

¡Gracias, La Cima, por creer en mí y por ayudarme a alcanzar la cima de mis logros!

Acerca de

La Cima es una organización que provee a mujeres jóvenes de comunidades marginadas los medios necesarios para tener acceso a educación universitaria de calidad y desarrollo humano pleno.

Envía testimonios de personas que gracias al apoyo recibido en tu OSC han podido mejorar su vida, o la de su comunidad. Escribe a alejandra.gonzalez@cemefi.org

Compartir: Twitter facebook Pinterest Linkedin Desconocido1 Desconocido

Se trata de jóvenes que han logrado culminar sus estudios básicos gracias al impulso de sus donantes

El 23 de junio se llevó a cabo la ceremonia de graduación de la Quinta Generación de estudiantes de preparatoria de la organización Christel House México. Para la organización representa una gran labor poder brindarle esta oportunidad a la juventud que más lo necesita, con el apoyo de empresas que impulsan su desarrollo profesional.  

Algunos de los estudiantes que se graduaron ya cuentan con becas hasta del 100% en centros universitarios privados, como la Universidad Centro, la Universidad Iberoamericana, la Universidad Panamericana, mientras que otro grupo de estudiantes ha conseguido un lugar en universidades públicas como la UAM.

En la ceremonia participaron el CEO International de Christel House, Bart Peterson; el presidente del Consejo Directivo, Gabriel Oropeza Griffith, y el alcalde de Miguel Hidalgo, Mauricio Tabe; quienes dirigieron a los estudiantes mensajes de aliento, reconocieron su resiliencia y los exhortaron a seguir adelante mostrando orgullosamente los valores de la institución: respeto, responsabilidad, integridad e independencia.

De la graduación de los 49 jóvenes fueron testigos representantes de las empresas y fundaciones que durante este periodo educativo donaron recursos económicos para sus estudios; WestRock, Laboratorios Senosiain, Financiera Independencia, UPS, Alcon, Novo Nordisk, RCI, GIA, Hoteles Wyndham, Fundación Lala, Fundación CAABSA, Cemefi, Fundación Magdalena Ruiz del Valle, Fundación ADRO, Fundación Beca, Fundación Becar, Fundación Innovamex, Bufete Jurídico Social del INCAM, JA México, Universidades Centro y Anáhuac.

Compartir: Twitter facebook Pinterest Linkedin Desconocido1 Desconocido

Historia de éxito de IXIM. Testimonio de Jerónima Guzmán Gutiérrez.

Vivo en San Jerónimo Tulijá, Municipio de Chilón, Chiapas. Llevo cuatros años que entré a IXIM. Tiene un año que iniciamos el ahorro en el grupo de IXIM.

Participé en el grupo de ahorro después de reflexionarlo mucho. Nos explicaron que el dinero se acaba rápido, eso me quedé pensando, y así fue que me animé a empezar a juntar mi dinero.

El cambio que yo veo es que ahora juntamos nuestro dinero varias mujeres y ya tenemos algo de dinero entre todas.

Ahora los niños ya están juntando también, pero hay que enseñarles para que se formen en el hábito de ahorrar.

Antes no ahorraba nada, aunque hubiera dinero. Pasa que los niños luego piden dinero para ir a la tienda, pero ahora ya no, ya no piden mucho los niños. Así nuestra vida.

Yo creo que esto sí ha traído cambios en la comunidad porque nos ayudamos mutuamente. Las integrantes del grupo que tenían algún problema, se les prestaba el dinero y eso es una ayuda. Incluso algunas personas de la comunidad que tienen familiares en el grupo, pidieron préstamos.

Hubo una persona de San José que vino porque supo que había dinero. Tenía un problema y vino a pedir un préstamo, pero ya no se le pudo dar porque ya habíamos cerrado el ciclo anual y era hora de hacer cuentas y repartir lo de cada una. Me dijo que iba a dejar como garantía la factura de su coche o una escritura de un terreno, por si no lo podía pagar. Nos estaba pidiendo diez mil pesos, pero ya no lo pudimos ayudar porque ya nos tocaba repartir el dinero.

Ahorrar me ayudó porque junté mi dinero, ya junté algo. Hay cosas que no tenemos, y lo que en verdad se necesita, es lo que vamos a comprar. Por ejemplo, se descompuso mi refrigerador y con esto lo voy a mandar a arreglar, y también voy a comprar un cerdito. Eso es lo que me fortalece, porque así podemos seguir trabajando. Sí nos ayuda lo que se está haciendo.

He pensado en darle mantenimiento a las ecotecnologías que instalaron en mi casa hace meses, cuando haya dinero. También por eso es que voy a seguir en el grupo, para eso estoy ahorrando. No estamos ahorrando para algo que no es necesario, solo para un rato y se acaba. Lo que se está haciendo es para algo duradero que se ocupa con los niños y niñas, eso es lo que vamos a comprar. Si se descompone el filtro, el comal u otras cosas, poco a poco con eso se va a comprar.

El aprendizaje que yo me llevo del grupo de ahorro es prepararnos, organizarnos en la casa cuando se está ahorrando algo de dinero, eso es mi aprendizaje, para que así le compartas a tus hijos e hijas, a tus vecinas o vecinos para animarlos, para que piensen si es que se animan a entrar también. Nosotras, las que estamos en el grupo, cuidamos nuestras cosas y cuando llega una visita a la casa, luego pregunta ¿dónde conseguiste esto? ¿dónde lo compraste? ¿cómo fue? y entonces ya le vamos a poder decir que esto ya es de nosotras, porque nosotras lo compramos. ¿Cómo le hiciste?,  Van a preguntar, pues porque juntamos nuestro dinero, salió de nuestro ahorro.

Yo me había propuesto de meta de ahorro seis mil pesos. Dije,  “a lo mejor lo logro”, y pues llegué a los siete mil.

Siento que mi vida se ha fortalecido, porque nunca había visto esa cantidad de dinero y también le agradezco a Dios, que con su ayuda lo pude lograr. Me siento bien por eso y también las mujeres que no tenían dinero, ahora también se sienten bien. De por sí no hay dinero, y si no hubiéramos ahorrado este dinero, jamás hubiéramos podido juntar seis mil o siete mil pesos o nueve mil, nada. Pero aquí nos impulsaron, nos dijeron “si consigues unos mil pesos, quinientos o doscientos, ya con eso te vas a la tienda, pero es solo por un rato y se acaba”. Pero esto no, gracias a Dios.  Está bien lo que estamos haciendo, pero necesitamos echarle ganas, que no nos desanimemos, aunque es complicado, pero tenemos que ver cómo lo hacemos.

Sí me gustaría continuar participando en el grupo de ahorro, hasta donde pueda, porque ya lo viví y me gustó. Así como dije, voy a mandar a arreglar mi refrigerador, voy a comprar un cerdito y eso me gusta. No es lo mismo comprar por kilo la carne de cerdo y comer con mis nietos. Por eso lo que quiero es comprarme un cerdito para después comer junto con mis hijos e hijas, no solo es para mí; sino para compartir esa comida con mis hijos, eso es lo que me fortalece el corazón.

¿Qué hacen las OSC? Conoce más historias de éxito de organizaciones de la sociedad civil en el siguiente enlace. Envía tus historias de éxito a alejandra.gonzalez@cemefi.org para que sean publicadas en este espacio y en las redes sociales de Cemefi.

“El voluntariado es una expresión básica de las relaciones humanas”, testimonio de Patricia Margarita Ramos Valencia.

Conoce la historia de éxito de Fundación Luis Pasteur

Recuerdo que un buen día, en una de las calles de mi querido Texcoco, vi una unidad médica móvil. Su apariencia y la dinámica que veía a su alrededor me generó confianza y me acerqué a preguntar qué tipo de estudios estaban realizando y de qué institución se trataba. La trabajadora social que estaba a cargo de la jornada de salud me informó que el estudio a realizar era un paquete ginecológico: papanicolau, colposcopia, vulvoscopia y prueba de Schiller; estudios para la detección y prevención del cáncer cervicouterino. Comentó que eran personal de la Fundación Luis Pasteur y que los estudios tenían una cuota de recuperación bastante accesible, de $150 pesos. ¡No podía creer que el costo de esos 4 estudios pudiera ser real y que estuvieran ahí para atender a las mujeres de mi comunidad!

Yo estaba pasando por un momento difícil en todos los ámbitos de mi vida, ya que no hacía mucho que mi matrimonio se había terminado. Con mi hija de la mano, emprendí un viaje en una aventura que no dio resultado y me encontraba en ese momento triste, frustrada y sin trabajo; así que el poder acceder a esos estudios a ese costo, para mí era maravilloso. Por la situación económica que tenía, eso significó una pequeña lucecita de fe. Pregunté si podía realizarme los estudios y me dijeron que aún tenían lugares disponibles. Corroboró la trabajadora social mi situación económica, la necesidad en salud y que estaba en condiciones físicas para la toma de los estudios, y procedí a realizar mi cuota de recuperación y me atendí.

Posteriormente, me registré para realizarme una mastografía. Para ese estudio me trasladaron a su clínica con un grupo de mujeres y cuando conocí las instalaciones de la Fundación, quedé gratamente sorprendida del trato tan profesional y amable con el que fuimos recibidas.

Ahí mismo en la Fundación, en algún lado vi un letrero en donde se nos invitaba a ser voluntarias. Ese mensaje entró por mis ojos y se fue directo a mi corazón, pregunté qué se requería para ser voluntaria y me dieron toda la información. Posteriormente, me visitó una trabajadora social hasta mi comunidad en Texcoco, me llevó un convenio, aclaró las dudas que tenía y así fue mi inicio por este hermoso camino del voluntariado. Ser Promotora voluntaria de la fundación Luis Pasteur me llena de profundo orgullo y agradecimiento, pues me ha llevado a vivir experiencias que me hacen recordar la misión por la cual estoy aquí y que, dentro de este mundo con tanta violencia, con tanto miedo, nos hemos olvidado de la importancia de ser por darle más importancia al hacer y al tener.

Grupo de voluntariado de la Fundación Luis Pasteur

Ser voluntaria en Fundación Luis Pasteur me ha permitido desarrollar mi ser al servir a los demás, siendo ese vínculo entre las mujeres de mi comunidad y la Fundación. Mi querida hija Ana Ximena ha comprendido al cien por ciento mi labor como voluntaria y me apoya en todo lo que puede; ella es mi motor, el centro de mi vida y mi mayor orgullo. Por ella y por mí realizo esta labor con mucho amor y entusiasmo, pues es además una forma de dar gracias por todos los regalos que la vida nos ha dado.

Afortunadamente la cultura de la prevención ha tenido eco en este grupo de mujeres de mi comunidad, las mujeres saben que pueden acudir a mí y a la Fundación para solicitar información sobre las jornadas y los estudios que año con año debemos hacernos. La frase “Al prevenir, salvamos vidas” ha sido muy importante dentro del grupo de mujeres que han confiado y se han realizado estos estudios preventivos con mucha satisfacción.

Importante comentar que el aprendizaje que he tenido como voluntaria es muy significativo.  Yo no imaginaba lo difícil que puede resultar para una mujer atreverse a realizar estos estudios, pues culturalmente no se nos ha enseñado a amarnos, y cuidar nuestra salud es la mejor expresión de amor propio que una persona pueda tener. Por ello, cuando una mujer vence sus miedos y pudores y se atreve a realizarse sus estudios ginecológicos, me llena de mucha satisfacción, pues el que ellas cuiden su salud significa que cuidan y aman a su familia y a ellas mismas.

Sin demeritar el papel del género masculino, en nuestra sociedad las mujeres son el eje de su familia; si una mujer enferma, enferma también la familia y esto repercute en el estado emocional, social, cultural y económico de los miembros de esta; por ello la importancia de crear consciencia de lo importante que es su papel dentro de la familia, la comunidad, el país y el mundo entero.

En alguna de las jornadas se acercó una señora que preguntó por los estudios que se estaban realizando. Le di la información y pensando en que habían faltado 2 personas -a las que por alguna razón no habían acudido- le ofrecí el lugar. Tras decirle el costo, ella checó en su bolsa y me dijo que iba a juntar dinero pues no le alcanzaba. Me comentó que ella trabajaba en fiestas infantiles como payasita y que no había tenido trabajo en esos días, que los gastos eran fuertes pues ella mantenía a su hija, a su papá ya mayor, a 5 gatitos y a 3 perritos que había rescatado de la calle en condiciones muy deplorables. Su testimonio me llegó a mi corazón y con apoyo de la trabajadora social se otorgó una exención de pago gracias a los donantes y aliados con los que cuenta la Fundación.

Este gesto de apoyo ella lo agradeció con lágrimas en los ojos. A partir de esa ocasión, cada año se realiza sus estudios juntando al cien por ciento la cantidad indicada y en sus presentaciones hace publicidad de la Fundación cuando sabe que tendremos jornada de salud. Esto es muy significativo para mí y por eso quise compartir de qué manera podemos impactar en la vida de las personas con estos actos de amor. Soy la voz de 110 voluntarias y de 3 voluntarios que cada vez que tenemos jornadas de salud salimos con el corazón y la bandera de la Fundación Luis Pasteur por delante, orgullosos de la labor que realizamos y del impacto que hemos ido logrando en las diferentes comunidades donde promovemos el apoyo que ofrece esta gran institución.

“Si caminas solo, irás más rápido. Si caminas acompañado, llegarás más lejos”.

Acerca de

La Misión de la Fundación Luis Pasteur es prevenir el cáncer cervicouterino y mamario, mediante la educación, el diagnóstico y tratamiento oportunos de alta calidad, especialmente en mujeres de bajos recursos.

Visita la página de la Fundación Luis Pasteur, en la siguiente liga.


Historia de éxito de Adrián Domínguez, atleta de Special Olympics


Soy Adrián Domínguez Sandoval. Nací en Ensenada, Baja California, México. Cuando tenía 15 años me uní a Special Olympics. Antes de entrar a la organización tenía problemas para hacer amigos y relacionarme con las personas, no sentía confianza en mí mismo ni confiaba en los demás, me frustraba fácilmente.

Ahora mi vida ha cambiado mucho: tengo varios amigos de todas partes del mundo; soy muy sociable, seguro de mí mismo, extrovertido, confío más en lo que puedo lograr; si fallo lo intento hasta conseguir mis metas, soy feliz y realizo más actividades que antes.

Me gusta la música, y sueño con tocar en una banda de rock. Mi pasatiempo es tocar la guitarra y la batería. A veces me reúno con mis amigos músicos para tocar juntos los ritmos que más nos gustan. Este año terminé la preparatoria y deseo seguir estudiando la universidad, la carrera de Música.

Mi lema: “Las medallas no se ganan en las competencias, se ganan en el entrenamiento.”

Me acuerdo que inicié en el deporte por rehabilitación física, pues tenía severos problemas de psicomotricidad. Gracias a mi entrenador empecé a participar en competencias de Special Olympics, con muy buenos resultados; y a participar en diferentes eventos deportivos dentro de la organización a escala mundial.

He ganado medallas en Juegos Mundiales como:

Mundial de Verano de Special Olympics, Atenas, Grecia 2011. Participé en natación y gané medallas de oro y plata.

I Mundial de Natación de Special Olympics, San Juan, Puerto Rico 2012. Participé en natación y gané medalla de plata.

Mundial de Invierno de Special Olympics, Pieonchang, Corea 2013. Participé con el equipo de Hockey sobre piso y gané medalla de plata del nivel 4 de competencia.

Juegos Mundiales de Invierno de Special Olympics, Austria 2017. Participó con el equipo de hockey sobre piso y gano cuarto lugar del nivel 2 de competencia.

El mejor momento en mi vida dentro de Special Olympics es haber conocido a mi máximo ídolo, el multi medallista, el nadador Michael Phelps. Conviví con él y recibí consejos para mejorar mis técnicas de nado, lograr más confianza y preparar mis competencias.

Hoy compito en natación y hockey sobre piso. Además, en Special Olympics desempeño el rol de Atleta Líder en su comunidad, dando pláticas de sensibilización a las personas y sobre todo a estudiantes de preparatoria, animándolos a cambiar su actitud y los oriento sobre cómo tratar a las personas con discapacidad y la forma correcta de dirigirse a ellas.

Mi mamá también es parte de mis logros. Es Directora Voluntaria del Subprograma Special Olympics México, Subprograma Baja California. Ella organiza, conduce y promueve entrenamiento deportivo y competencias atléticas de Special Olympics.

Acerca de:

Special Olympics es una organización de la sociedad civil que integra a la sociedad a personas con discapacidad intelectual para que puedan alcanzar su potencial físico y mental, dentro de un marco de respeto, aceptación y equidad, apoyando a sus familias y sirviendo como puente con otras instituciones. Visitar Special Olympics Mexico

 

Te invitamos a difundir los éxitos de las organizaciones de la sociedad civil. Envía historias de OSC a alejandra.gonzalez@cemefi.org

Historia de éxito de la organización Cántaro Azul. Testimonio de Rosa Pérez López.

En la temporada de sequía, no hay dónde encontrar agua. Es muy difícil cuando se nos acaba el agua. Pero tenemos un almacenamiento, así es como nos ayuda a tener y tomar un poco de agua.

Es muy difícil cómo fueron pasando los tiempos, complicado para nosotros. Donde hay algunos pozos, ahí es donde llegamos a cargar el agua. Algunos están muy lejos. A veces encontramos agua, y a veces no.

Cuando el Ayuntamiento construyó el tanque de almacenamiento de agua, no quedó bien. Cuando llegó Cántaro Azul, ellos nos explicaron cómo podemos cuidar el agua. Ahora el agua está muy bien.

El agua viene y el tubo vienen de arriba, pero el agua se transporta con la manguera y hasta acá se vuelven a colocar. Los de Cántaro Azul lo realizaron. Cuando vinieron los trabajadores, tanto el patronato y los habitantes de la comunidad, compusieron los tubos, y pusieron un estanque.

En los pasados meses de marzo y abril solo nos abasteció un tubo. De los tubos que hay, solo nos ayudó uno, porque aquí se secó por completo.  Donde vienen las dos mangueras de arriba, no se secó; sigue permaneciendo el agua, así como ahora. La tapa es nueva, al igual que la válvula.

Vamos a cuidar el agua porque nosotros ya hemos quedado como responsables. Si no lo hacemos, ¿quién más viene a componer en dos, tres años? Si se acaba esta organización, no va a haber alguien más que venga a componerlo.

Nos pusimos de acuerdo los habitantes de la Comunidad Guadalupe Jaguala para tapar el ojo de agua y evitar que entren basuras. Ahora, aquí en la captación del agua está muy bien, ya no le entra basura. Por eso ahora el agua está limpia.

Cuando hay patronato de agua, es quien organiza. Junta a las personas para ver y hacer lo que se tiene que realizar. Desde hace mucho que no tenemos agua. Fue muy difícil para nosotros porque no tenemos dónde tomar el agua.

Cuando empezamos con los de Cántaro Azul, nos dio un sistema para desinfectar el agua que son de los pozos. El primer trabajo que empezamos a realizar fue sobre las mesitas. Primero nos enseñaron a desinfectar el agua que tomamos. Nos juntamos como mujeres para juntarla. Los hombres todavía tienen mucho trabajo después de esto. Siento que estamos creciendo y no nos estamos haciendo para abajo.

Cuando traigo el agua desde la llave, aún no está desinfectada. Cuando llega mi agua, lo almaceno en una cubeta para traerlo en la cocina. Luego, lo deposito en otra que tiene como un colador.

Todo lo que se puede preparar en la cocina gracias al agua. Si no encontráramos agua, nos morimos de sed, porque el agua siempre se necesita a donde quiera. Aunque lleves tu bola de pozol sin preparar, pero si no encuentras agua, no puedes hacer nada. Aunque quieras cocinar maíz o preparar alimentos, no logras hace nada sin el agua.

Cuando convocamos a reunión, las personas más o menos llegan,  como que van animando sus corazones, ¿por qué? Porque ya vieron este primer trabajo. Muchas gracias a Cántaro Azul, porque están viendo nuestras comunidades y no es para ustedes. Es una necesidad de nuestra comunidad.

Mujer limpiando agua
Cántaro Azul enseñó a las mujeres de la comunidad chiapaneca a filtrar el agua del río

Historia de éxito de la OSC Cuenta Conmigo. Testimonio de Blanca Delia, mamá de un adolescente trans

Mi nombre es Blanca Delia. Soy mamá de un chico trans de 13 años, su nombre es Alexander Enríquez y soy profesora.

Hace 5 años yo creía que la diversidad sexual era el resultado de una elección personal, y aunque siempre me he considerado muy respetuosa con respecto a estos temas, la verdad es que sabía poco  y en verdad estaba convencida de que era una elección personal.

Descubrir que mi hijo es una persona LGBT

Apoyar a mi hijo significó un gran reto y la verdad es que al principio lo viví con un poco de miedo porque no comprendía lo que estaba ocurriendo. Incluso, debo aceptar que en algún momento entré en esta etapa de la negación y decía “no, esto no está ocurriendo” o “se le va a pasar pronto”…

Pero después se fue el miedo y empezó a llegar la incertidumbre, y esta necesidad de poder estar a la altura de la situación y poder acompañar a mi hijo en este proceso como él se lo merece. Así que cuando comprendí eso, lo siguiente que hice fue buscar ayuda profesional.

Mi encuentro con la organización Cuenta Conmigo

Deseosa de poder acompañar a mi hijo de la mejor manera posible, me puse a buscar información en internet. La verdad es que fui encontrando de todo. Había información que no me daba mucha confianza, que no sabía de dónde surgía, si era fiable, si era confiable.

Así que pues, bueno empecé a generar algunos filtros; y así fue como llegué a Cuenta Conmigo. Efectivamente, corroboré, comprobé, que era una institución seria, que cuenta con profesionales que nos acompañan a vivir este proceso de duelo, a poder identificar estas ideas limitantes que tenemos nosotros los papás muchas veces.

Y que en el momento en el que nosotros podemos trabajar eso, nos convertimos en una mejor versión de nosotros para poder ofrecer a nuestros hijos y que ellos vivan el proceso como necesitan.

El antes y el después de conocer Cuenta Conmigo

El antes y el después para mi fue muy importante. Al principio, la verdad es que tenía un poco de miedo. Tenía algunos prejuicios, tenía algunas ideas limitantes que de pronto no me dejaban desenvolverme de la mejor manera o como yo esperaba con mi pequeño.

Pero en la medida en que fui tomando el taller, estas dudas se fueron disipando poco a poco. Estos miedos se fueron disipando también. Y entonces, empezaba a encontrar mayor claridad sobre cómo poder educar a mi hijo, cosas que podía hacer. Y eso me dio muchísima paz, muchísima tranquilidad con respecto al proceso que estábamos viviendo como familia. Y yo creo que eso también se ve reflejado en nuestros pequeños.

Mi aprendizaje sobre diversidad sexual

Hoy día yo creo que la diversidad sexual es el resultado de la responsabilidad que han tenido muchas personas para descubrirse. De verdad creo que es un proceso de autodescubrimiento, pero sobre todo, de ejercer su libertad, de asumirse, de expresarse y de vivir su sexualidad sin más límites que el respeto a los derechos de otras personas.

Relevancia de Cuenta Conmigo en mi familia

Lo que el taller significó para mi es como una brújula que pude encontrar  en un momento en el que yo me sentía perdida. No solamente yo, creo que en términos generales la familia, de pronto al no saber qué hacer, el taller para nosotros fue justo eso: una brújula en términos, primero, de normalizarnos.

De poder encontrar incluso otras familias que estaban compartiendo la misma situación. Saber de las experiencias de vida de otras personas, eso nos hizo sentir muchísima tranquilidad. Pero sobre todo, y creo que una de las cosas más importantes, es que ante este desconocimiento del tema y de que nos sentíamos perdidos, pudimos encontrar la mejor manera de poder estar para nuestro hijo, como él lo necesita, y encontrar cosas muy específicas para poder acompañarlo.

Historias y participación en Cuenta Conmigo

Cuenta Conmigo es una gran red de apoyo que está en constante crecimiento. Cada historia, contada con gran valor por las personas, ayuda a promover el bienestar, la inclusión y el respeto de la diversidad sexual en todo México. Ustedes son muy importantes y nos hacen falta en esta gran red de apoyo. ¿Contamos contigo?

Si eres una OSC, cuéntanos tu historia de éxito. Escribe un correo a alejandra.gonzalez@cemefi.org para que sea publicada en este espacio.

Fotografía de Blanca Delia, beneficiaria de Cuenta Conmigo
Blanca Delia encontró en Cuenta Conmigo las herramientas para apoyar a su hijo en su proceso

Historia de éxito de La Cima IAP. Testimonio de Alejandra García Durán

Foto de Ale García, graduada de La Cima IAP
Alejandra García es originaria de la comunidad Otomí de Santiago Mexquititlán, Municipio de Amealco, Querétaro.

Soy una mujer joven originaria de la comunidad Otomí de Santiago Mexquititlán, Municipio de Amealco, Querétaro. Ninguno de mis padres finalizó la primaria. Mi padre falleció y mi madre es artesana de la muñeca otomí. Yo soy  la primera mujer de mi familia en finalizar preparatoria y gracias al apoyo de La Cima IAP,  la primera en graduarme de Universidad.

Antes de llegar a La Cima, mi vida era complicada. Cuando llegué a La Cima IAP vivía sola, me sentía sola emocionalmente, tenía problemas económicos, no me alcanzaba para la comida, tenía muy contado el dinero, prefería guardar el dinero para pasajes que comprar otras cosas.

La Cima me ofreció la oportunidad de tener un techo donde dormir, una beca completa, apoyo económico, apoyo emocional y apoyo social. De no haber tenido acceso a La Cima IAP, ya tenía considerado dejar la universidad y volver a mi casa. La organización me ayudó a continuar con sus estudios, a sentirme protegida, a sentirme apoyada.

En la Cima me han apoyado en todos los aspectos para mi bienestar, por ejemplo, durante la pandemia sentí mucho su apoyo a pesar de la distancia, me brindaron las herramientas que necesito para crecer, el programa me ayudó a continuar mis sueños.

Agradezco a La Cima por brindarme todo el apoyo necesario para continuar con mis estudios, sobre todo agradezco los cursos y talleres extra escolares que me han brindado para tener una formación completa. Participar en los talleres de desarrollo humano que me ofrece La Cima ha cambiado mi forma de ver las cosas, ha abierto mi mente a pensar más cosas que no me había preguntado antes, dirijo mis pensamientos y mis acciones en dar lo mejor de mí, perdonándome, perdonando a los demás, amándome y amando a los demás, no cuestiono el comportamiento de los demás y no juzgo sus acciones.

No siempre puedo, pero cuando no lo hago, el simple hecho de ser y estar consciente de que estoy haciendo yo mal conmigo misma y con los demás, hace que reflexione nuevamente sobre que todos tenemos una razón de ser, un pasado conocido y desconocido, cosas que sanar, cosas que descubrir o aprender, y eso hace lo bello de la diversidad humana.

Ha mejorado mis relaciones con los demás, pero sobre todo, conmigo misma. Aún me faltan bastantes cosas por aprender y poner en práctica, pero estoy en total disposición de hacerlo; pues quiero poder sentirme libre.

Gracias al apoyo de La Cima IAP me gradué como Ingeniera Industrial este agosto 2022. Ese mismo mes, fui contratada como Ingeniera de Procesos en una empresa en Querétaro.

Como parte del programa integral de La Cima IAP, desarrollé un proyecto comunitario con el objetivo de mejorar el ingreso y condiciones de trabajo de artesanas Otomíes de comunidades de Amealco, Querétaro, ofreciendo entrenamiento en herramientas de administración y estandarización de procesos de producción de muñecas.

En un video, la propia Alejandra explica su proyecto comunitario. Haz clic en este enlace para ver el video en Youtube.

Logo ESR Logo Institucionalidad y transparencia Logo OSC Digital
© Derechos de autor 2024. Centro Mexicano para la Filantropía A.C.
Ir arriba